El trasfondo del buen humor

Publicado el 25/08/2010 ~ 1 comentario
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“No te tomes la vida muy en serio, al fin y al cabo no saldrás vivo de ella”. Leí esta frase hace muchos años en algún calendario, o quizá en el envoltorio de un caramelo. Lo que quiero decir es que la frase no procede de mis lecturas más serias. Y, sin embargo, me produjo un impacto no pequeño. No sé si el autor era un cínico, o un descreído, no sé lo que era; pero esa frase para mí tiene sentido. Me recuerda que todo lo de este mundo es efímero (no despreciable) y que el buen humor es mucho más importante de lo que parece.
Shakespeare tiene un pasaje genial en su “Julio Cesar” que viene a ilustrar esta idea. Julio y Antonio atraviesan Roma en una cuadriga, se dirigen al circo. El pueblo les saluda a su paso. En una esquina ven a Casio y entonces Julio Cesar comenta: “Rodéame de hombres gruesos, de hombres de cara lustrosa, y tales que de noche duerman bien. He ahí a Casio con su figura extenuada y hambrienta: piensa demasiado, es peligroso. No le temáis Cesar —dice Marco Antonio— no es peligroso, es un noble romano de rectas intenciones. Le quisiera más gordo —replica Julio— lee mucho, es un gran observador y penetra admirablemente en los motivos más intrincados de las acciones humanas. Él no es amigo de diversiones, ni oye música, rara vez sonríe. Tales hombres no sosiegan jamás”.
La alegría de vivir es todo un patrimonio, un tesoro. Los que llegan a adquirir la sabiduría son personas a las que no es fácil arrebatar la alegría. Hay cosas que matizar en el pasaje de Shakespeare, pero quedémonos con esto: “rara vez sonríe”. Todo un tratado de crítica del comportamiento. “Rara vez sonríe”. La verdad genera belleza y genera alegría. La falsedad, los señuelos, las mentiras, la insinceridad, producen almas atormentadas y retorcidas. La alegría de la mentira es efímera, es sólo el preludio de la tristeza.
Hay que probar a sonreír. Quizá ese cable desconocido funcione también en sentido inverso. Quizá el que se proponga sonreír a todos acabe por hacer que su corazón descanse. A.S